Cada 4 años

Empiezan las elecciones presidenciales de mi país, ubicado en un rincón del mundo en el caribe, con clima cálido y confortante, pero admirar las maravillas de mi pais no sera en esta entrada. Las elecciones dan entrada a un clima de estrés entre los habitantes, ya que nadie sabe dar su opinión civilizadamente sin enfrascarse en una discusión que en muchas ocasiones genera violencia y produce hasta la muerte, dicho esto, los políticos cada cuatro años nos ofrecen los mismo una y otra vez, campañas repetitivas a lo largo de la historia de República Dominicana, las emisoras locales inundadas de publicidad política, las televisoras por igual, en cada rincón de la ciudad y los pueblos afiches, vallas, bajantes, autobuses con bocinas, entaponamiento en las principales avenidas con sus caravanas, etc. 

Cada cuatro años se cambia al antojo de los funcionarios de turno la constitución para beneficiar a los mismo con la reelección, para así poder disfrutar un periodo mas de tiempo del rico pastel que los engorda, dejando al pueblo sumido en la miseria aún más de lo que estuvieron en el periodo anterior, los funcionarios salen a reconstruir por los barrios en menos de seis meses las obras que tenían que hacer en todo el periodo de gestión, embaucan al pueblo con migajas para conseguir el voto y así poder seguir engordando con los impuestos que paga el pueblo. Se sobrevaloran  las obras construidas al doble o un poco más de su precio real, entre muchos otros actos de corrupción que de mencionarlos harían el texto muy largo y esa no es la finalidad. 

Si toman el poder los opositores no se continua con lo que estuvo bien del gobierno anterior, se trata de implementar sus propias políticas, terminando así de hundir el país, no son continuistas. Los problemas de electricidad nos afectan desde más de 60 años y en todo ese tiempo el resolver el problema no pasa mas que de una promesa, la educación con tan baja calidad  y una de las más deficiente de américa latina, los servicios primarios de salud dan verguenza, ya que más del 50% de los hospitales carecen de medicamentos y camillas para los pacientes. La seguridad ciudadana se agrava mas y mas con el paso del tiempo ya que la economía no se distribuye con equidad, pero según dicen los expertos es una de las más crecientes en el sector, que conste que ese crecimiento no lo percibe la población. El transporte en las ciudad es completo caos, dejado en manos de los sindicalistas los cuales manejan a su antojo el tiempo de la población y el precio de los pasajes, teniendo el gobierno una poca participación en esta materia ya que ningunos se dispuso a fomentar el desarrollo del mismo, aunque ya se cuenta por lo menos con el 10% del transporte por parte del gobierno esto no es suficiente para erradicar ese cáncer. Estas inquietudes son las que preocupan al pueblo dominicano desde hace mas de 60 años y durante todo ese tiempo todos los politicos solo prometen resolver y no pasan mas que de solo palabras.